La hoz y el martillo (☭) significan la unión entre los trabajadores agrarios o campesinado y los trabajadores industriales u obreros. Fue asumida por la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y fue la bandera de la República Socialista Federativa Soviética Rusa (Rusia). Se implementó en 1923 y tuvo vigencia hasta 1991 cuando la URSS fue disuelta.

La bandera roja fue utilizada por diversos grupos marxistas y socialista desde mediados del siglo XIX en adelante. Por lo mismo, con el triunfo de la revolución Rusa dirigida por Lenin en 1917, en 1923 se adopta la bandera roja con una hoz y un martillo bajo una estrella de cinco puntas como el símbolo de la URSS. 

Este símbolo tuvo una gran carga simbólica pues representaba también el triunfo del socialismo sobre los nazis. 

Es por ello que la hoz y el martillo eran símbolo de esperanza, solidaridad, unión, libertad y fraternidad. 

Además, el símbolo fue asumido por todos los partidos comunistas que incluso discrepaban con la URSS o con China. Pongamos una lista sencilla extraída del bueno de Wikipedia:

- Hoz y martillo en la versión del Partido Comunista Chino.

- Bandera de la Unión Soviética.

- Bandera del Partido Comunista Libanés.

- Bandera del disuelto Partido Comunista de Checoslovaquia.

- Emblema del Partido Comunista de Checoslovaquia.

- Bandera del disuelto Partido Comunista Rumano.

- Bandera de la disuelta Liga de Comunistas de Yugoslavia, anterior Partido Comunista de Yugoslavia.

- Bandera del Partido Comunista de la India (Marxista) y Partido Comunista de la India.

- Bandera del Partido Comunista de Vietnam.

- Bandera del Partido Popular Revolucionario de Laos.

- Bandera del Partido Comunista de Nepal (Marxista-Leninista Unificado).

- Bandera del Partido Comunista Unificado de Nepal (Maoísta).

- Bandera del disuelto Partido Comunista de Kampuchea.

- Emblema del Partido Comunista de la Federación Rusa.

-Bandera del Partido Comunista de la Federación Rusa.

- Hoz y martillo en la versión del Partido Comunista de Argentina.

- Hoz y martillo en la versión del Partido Comunista de España

- Símbolo del Partido Comunista de Chile.

- Hoz y martillo en la versión del disuelto Partido Comunista Mexicano.

- Hoz y martillo en la versión de la CIPOML.

- Bandera del disuelto Partido Comunista Italiano.

- Símbolo del Partido Comunista de Brasil.

- Bandera de la República Democrática de Albania (1944-1946).

- Bandera de Sendero Luminoso organización terrorista peruana, actualmente muy debilitada.

Ajá, solo hay un solo grupo considerado terrorista que usó el símbolo de la hoz y el martillo: Sendero Luminoso. Ello porque así ha sido procesado por el Estado peruano. No ha sido ni el más importante ni el más representativo dentro del comunismo mundial.

En el Perú se sufrió un terrible conflicto armado interno entre dos partes beligerantes: el Partido Comunista del Perú - Sendero Luminoso y el Estado peruano. El primero se hizo famoso por la multiplicación de pintas de hoz y martillo en universidades,  calles, cerros, plazas, etc., además de los bastante conocidos actos terroristas. Esto es, el partido subversivo peruano Sendero Luminoso usó un símbolo que representa vida y solidaridad, a pasar a instalarse en el orden simbólico del imaginario social como un símbolo que encarna casi casi la maldad absoluta.

Es completamente válido que los ciudadanos peruanos crean que la bandera roja y la hoz y el martillo son símbolos de terror, porque eso fue lo que vieron siempre, es lo que se encontraba sobre el cadaver de algún “traidor” (soplón) o en lo que veían pintado por sus calles temiendo que lo peor podía pasar pronto. Sin embargo, aunque los motivos para creer que la hoz y el martillo son símbolos terroristas per se parten de una base equivocada. Me explico.

Lo que hizo SL, en su intento de tomar el poder por medio de las armas, fue asesinar a cientos de cientos de campesinos y demás ciudadanos, a pesar de que su objetivo bélico eran los agentes del Estado peruano: alcaldes, gobernadores, jueces, fiscales, policías, militares, etc. Por eso, repito, es legítimo el odio o el miedo social ante este símbolo. A lo cual hay que sumar la campaña mediática de los gobiernos.

¿Qué hacer? Un proceso profundo y comprometido de información, comprensión y respeto. Ir más allá de la instalación hecha por SL y también hecha por el gobierno fujimorista.

A Fujimori le convenía que se crea que la hoz y el martillo era exclusivamente un símbolo terrorista para que así 1) no se confíe en ninguna organización de izquierda, socialista o comunista, 2) imponerse como el salvador del Perú y 3) hay que temer a quien use ese símbolo o se proclame de izquierda.

Como vemos, hoy por hoy, tales intenciones se han cumplido a cabalidad: solo basta ver la guerra sucia hecha a Verónika Mendoza y la imposición del sambenito de "terruca". Y detrás de esa guerra sucia ha estado el fujimorismo, los medios de comunicación y el gran empresariado. Y esto porque tanto Fujimori como la concentración de medios y el empresariado odian a la izquierda, ya que ella pugna por una sociedad más solidaria, equitativa y eso a los Fujimori y a los neoliberales les repele, además de ir contra los intereses de las clases propietarias.

Entonces:

- La hoz y el martillo no es per se un símbolo terrorista, sino todo lo contrario: es el símbolo de la esperanza y de la unión.

- Los partidos comunistas usan la hoz y el martillo como símbolo principal y nadie en otro países los agreden y/o insultan de terroristas por tener ese símbolo.

- Pensar que la hoz y el martillo es un símbolo terrorista puede deberse a dos motivos: 1) por el trauma social generado por la guerra interna, en la cual el PCP-SL cometió actos de terror y asesinatos, usando el símbolo de los comunistas; y 2) por el odio irracional a todo el comunismo, en parte sostenido en ese trauma, pero usándolo instrumentalmente, de manera que sea favorable a réditos idelógicos, esto es, desprestigiar a la izquierda, en general, y al comunismo, en particular, con el famoso "terruqueo". Añadiría una tercera razón: sumado al trauma que generó la guerra interna, se debe a un desconocimiento bastante alarmante de historia y cultura. 

Los que sigan pensando que ser comunista o socialista o de izquierda es igual a ser terrorista, luego de tener claras las distinciones que hemos esgrimido aquí y de haberse reconciliado con nuestra historia reciente, solo mostraría su poco deseo de salir de un pensamiento que, en muchos casos, es altamente dogmático.

Es un símbolo tan importante que hasta Putin –presidente de Rusia y que no es comunista– la restableció para la celebración de los 70 años de la victoria del comunismo soviético sobre los nazis.

Así que, si se toma en consideración lo expuesto aquí, ahora antes de creer/pensar/decir que el rojo, la hoz y el martillo, hablar de marxismo o tener un libro de Mao son actos proterroristas, pues medítalo bien, ya que podrías estar cayendo en un reduccionismo facilista muy grosero. El que milita en un partido de izquierda, ya sea el PCP, PS, TyL, FA, etc., no son terroristas; al contrario: varios de esos partidos izquierdistas tienen un rechazo total a Sendero Luminoso y al MRTA, condenando su accionar en la guerra interna.

Seguir pululando ante la población, con mala intención y usando el dolor de las víctimas de la guerra, la mentira alevosa de que la hoz y el martillo, símbolo de la liberación de la opresión, opresión que las clases propietarias realizan sobre las clases productoras, es un símbolo terrorista, es una completa irresponsabilidad. No se debe continuar esparciendo un discurso que es falso y que tiene la finalidad de desprestigiar a personas que están comprometidas con la libertad, la justicia y la democracia.

Por eso, para que ello cambie, es necesario informar, educar y enseñar, pero a la vez debemos comprender y respetar que para muchos peruanos, de modo legítimo, este símbolo les signifique terrorismo; de manera que se pueda entender mejor, sin odios ni dogmas, que interpretar así la hoz y el martillo no es la única y exclusiva posibilidad existente, que hay otras, como las que hemos intentado de explicar. Es una larga y ardua tarea.